Ahí van mis primeros macarons medio decentes,
después de varios intentos estos ya empiezan a parecer macarons, aunque aún
estoy lejos de hacerlos perfectos siento que ya me estoy acercando a lo que
tienen que ser unos macarons en condiciones.
Podemos utilizar colorantes para darles color, pero que no sean líquidos ya que no nos
interesa añadir más humedad, yo no he utilizado ningún colorante porque pensaba
que no me iban a salir bien.
Para que unos macarons salgan bien intervienen
muchos factores, como tener las claras a la temperatura correcta, tamizar bien
los ingredientes, mezclarlos con cuidado, un correcto tiempo de secado en el
que influyen muchas cosas como la temperatura de la cocina, la humedad que hay
en el ambiente… y lo más importante un correcto horneado.
Aun así a mucha gente le salen bien a la primera,
pero a mí siempre se me han resistido, han sido varios intentos fallidos y
numerosas pruebas para llegar a este punto. Después de consultar varios libros
y diversos blogs sobre el tema por fin encontré algo que me funcionó, a través
del blog pienso-luego-cocino. La
explicación que dan sobre este tema es muy completa y a mí me funcionó bastante
bien, os lo recomiendo.
Los Macarons
se inventaron en Italia en el siglo VIII, posteriormente la receta fue
llevada a Francia por Catalina de Medicis al haberse casado con el Duque de
Orleans. La creación de los macarons como los conocemos hoy en día es una
receta que ha tenido décadas de perfeccionamiento, y fue Pierre Desfontaines,
pastelero de Ladureé, quien unió por primera vez dos macarons con un ganache.
Ingredientes
para 30 unidades (15 macarons)
58 gr de almendra molida, 105 gr de azúcar glas, 56
gr de claras, 28 gr de azúcar, un pizca de sal.
Para
la ganache de chocolate y naranja
100 gr de nata, la ralladura de una naranja, 18 gr
de azúcar invertido, 20 gr de mantequilla, 110 gr de cobertura negra (70%).
Elaboración
Antes de empezar conviene dejar envejecer las claras
varios días para que pierdan humedad, las podemos dejar en el frigorífico bien
tapadas, aguantan más de una semana.
El día que queramos hacer los macarons, conviene
sacar las claras del frigorífico 2 horas antes para que estén a temperatura
ambiente. Preparamos una hoja de papel que será nuestra plantilla y dibujamos
círculos con ayuda de un tapón de botella para que nos salgan todos los
macarons iguales. Ahora la colocamos en la bandeja del horno y la cubrimos con
papel de hornear, ponemos un poco de mantequilla en las puntas de la hoja para
que no se mueva.
Ahora tamizaremos primero la almendra molida, lo
haremos 2 o 3 veces y la reservamos en un bol. Luego tamizaremos el azúcar
glas, una sola vez. Juntamos los dos ingredientes en un bol y los mezclamos con
la ayuda de una espátula, para que se mezclen bien y volvemos a tamizar los dos
ingredientes juntos.
En un bol vertemos las claras a temperatura
ambiente, junto con el pellizco de sal para estabilizarlas, empezamos a
montarlas y cuando empiecen a estar firmes añadimos en forma de lluvia los 28
gr de azúcar. Seguimos montando hasta que estén bien firmes, han de quedar muy
bien montadas, a punto de merengue, la mejor forma de ver si están bien
montadas es girando el bol y que no se caigan.
Una vez las claras estén firmes, añadiremos un poco
del merengue a la mezcla de almendra y azúcar glas, mezclamos con movimientos
envolventes y con cuidado, después añadimos otro poco y seguimos mezclando con
cuidado de que no se nos baje la mezcla, al final obtendremos una mezcla
cremosa y suave, pero no líquida.
Metemos esta mezcla en una manga y vamos rellenando
los círculos, colocaremos la manga completamente vertical y en el momento que
el botón este lleno, dejamos de presionar
para impedir que la masa siga fluyendo. Una vez tengamos todos los
botones, con una mano sujetamos una punta del papel de hornear (donde está la
masa de macarons) y con un movimiento rápido retiramos la plantilla de los
macarons.
Cogemos la bandeja por los extremos y le damos unos
golpecitos contra una superficie de trabajo plana (mármol, suelo...) varias veces, para que la
masa se asiente. Luego dejamos secar los
macarons, para que se forme la costra en la superficie.
El proceso de secado puede variar mucho dependiendo
de la temperatura de la cocina, la humedad del ambiente, el clima…pueden estar
secos en 20 minutos, como pueden tardar 4 o 5 horas.
Una vez transcurrido el tiempo, para saber si ya se
pueden hornear, tocaremos con la yema de los dedos la superficie de un macaron,
si no se nos engancha la masa al dedo o la masa se hunde, es que ya están a
punto para hornear.
Precalentamos el horno a 170ºC, introducimos la
bandeja de los macarons en el horno, en la parte más baja del horno, así
ayudaremos a que se hagan también por la parte inferior. Cerramos el horno y
bajamos a 145ºC. Hornearemos durante 12
minutos. En el minuto 6, abrimos ligeramente la puerta del horno para que se
vaya el exceso de humedad del interior.
Una vez estén horneados, retiramos la bandeja del
horno y dejamos un minuto para que se hagan bien de la base con el calor
residual. Después los pasamos a una rejilla para que se acaben de enfriar.
Una vez fríos guardaremos los macarons en un
recipiente con cierre hermético durante 24h - 48 h en el frigorífico, antes de
rellenarlos. No tener prisa por rellenarlos.
Para elaborar la ganache, infusionamos la ralladura de naranja con la
nata y el azúcar invertido, llevamos hasta los 90ºC y retiramos del fuego. Colamos
y con esta mezcla escaldamos la cobertura, previamente troceada, y mezclamos
bien. Ahora añadimos la mantequilla cortada a daditos y mezclamos bien. Introducimos
la ganache en una manga y rellenamos los macarons.
2 Comentarios
Hola Roberto,
ResponderEliminarVeo que tu también has hecho varios intentos fallidos y no has desistido hasta conseguirlo.
Gracias por el enlace y nos alegra que te hayan servido nuestras explicaciones de cómo hemos elaborado los macarons.
Un saludo
Hola Neus,
EliminarGracias a ti por ilustrarnos con tu explicación, los macarons era un tema que me estaba frustrando desde hace mucho tiempo y lo que mas me fastidiaba era no saber que es lo que estaba haciendo mal, ahora gracias a ti empiezo a ver la luz!
Muchas gracias Neus, un saludo!