La combinación de café
y chocolate en un postre es algo que siempre me ha encantado, pero si a esto
además le añades Amaretto ya es la bomba!
Así que había que hacer
una tarta con estos sabores, la tarta está compuesta por una mousse de café y
anís estrellado, en su interior lleva una mousse de chocolate blanco y
Amaretto, después va todo el conjunto bañado con un glaseado de chocolate con
leche y finalmente una base crujiente de streussel de avellanas.
Para la decoración,
como veréis se me ha ido un poco la olla, porque lleva mucho trabajo
hacer esta flor de chocolate, pero era algo que hacía tiempo que tenía ganas de
hacer y disfrutado mucho haciéndola. La idea de hacer esta flor me surgió
después de ver las grandes obras de arte que hacen algunos pasteleros con el
chocolate y me entraron ganas de hacer algo así a pequeña escala, lo cierto es
que hacer estas piezas de chocolate lleva bastante trabajo porque hay que ir
haciendo las piezas una por una y después unirlas, además todo esto hay que ir
haciéndolo con el chocolate bien atemperado.
Las piezas se van uniendo con más
chocolate, como si fuera pegamento, pero claro para que se aguanten en la
posición que quieres tienes que esperar a que se seque y eso podría ser eterno!
Así que me puse a investigar para ver como lo hacían y descubrí que lo que
hacen para que se seque rápido la pieza que acabas de poner es enfriar el
chocolate con un spray de aire comprimido, este aire sale muy frío y hace que
el chocolate se seque al instante. Es un spray fácil de conseguir en cualquier
ferretería, normalmente se utilizan para limpiar los teclados de los
ordenadores y cosas así.
Una vez que me hice con
el spray me lance a por mi primera pieza de chocolate, para hacerla fui
haciendo los pétalos con la hoja de una puntilla (cuchillo pequeño) que iba
sumergiendo en el chocolate y después marcaba el pétalo sobre una hoja de papel
de acetato, después colocaba los pétalos sobre un molde de media caña para que
cogieran una forma curva y los dejaba secar, hice tres medidas diferentes ya
que los pétalos del interior de la flores suelen ser más pequeños que los de
fuera.
Para hacer los pistilos
he utilizado una manga y he ido formado pequeñas líneas ligeramente curvadas
sobre un papel de acetato. Para montar la flor he hecho una pequeña base
redonda de chocolate, después he ido colocando todos los pétalos y finalmente
los pistilos en el centro. Para darle un aspecto más vivo he pulverizado la
flor ligeramente con un spray rojo de manteca de cacao de modo que queden
pequeños puntitos rojos en los pétalos y después he soplado un poco de oro en
polvo por encima.
Alrededor de la flor he
colocado unas placas de chocolate negro ligeramente curvadas y para que la flor
quedara ligeramente inclinada he hecho otra base redonda de chocolate y he
puesto una montañita de chocolate en una esquina para que cuando colocara la
otra base con la flor quedara un poco inclinada.
Como veis tiene
bastante rollo la flor, pero me ha encantado hacerla y creo que para ser la
primera ha quedado bastante bien.
Para hacer esta tarta
he utilizado un aro ovalado de 18,5 cm de largo y 12,5 cm de ancho, para el
interior un aro ovalado de 14 cm de largo y 7 cm de ancho, para el streussel de avellanas he utilizado un
aro ovalado de 21 cm de largo y 14 cm de ancho.
Ingredientes
Para la mousse de café y anís estrellado
100 gr de nata, 65 gr
de azúcar, 75 gr de yemas, 5 gr de gelatina, 3 estrellas de anís, 8 gr de café
soluble, 375 gr de nata semimontada.
Para la mousse de chocolate blanco y Amaretto
75 gr de chocolate
blanco, 25 gr de nata, 12 gr de yema, 9 gr de azúcar, 2 gr de gelatina, 120 gr
de nata semimontada, 12 gr de Amaretto.
Para el streussel de avellanas
100 gr de harina, 100
gr de avellanas molidas, 100 gr de azúcar moreno, 100 gr de mantequilla.
250 gr de chocolate con
leche, 25 gr de glucosa, 125 gr de leche, 4 gr de gelatina.
Para la flor de chocolate
70 gr de chocolate
blanco, 50 gr de chocolate negro, 50 gr de chocolate con leche, spray rojo con
base de manteca de cacao, oro en polvo y spray de aire comprimido.
Elaboración
Empezamos preparando el
streussel de avellanas, cogemos un bol y mezclamos el azúcar con la avellana
molida y la harina, finalmente añadimos la mantequilla cortada en dados y
estrujamos bien la mezcla entre los dedos hasta conseguir una masa homogénea.
Formamos una bola, la envolvemos en papel film y la congelamos.
Ahora preparamos la
mousse de chocolate blanco, empezamos
mezclando el Amaretto con los 120 gr de nata y semimontamos, guardamos
en la nevera. A continuación calentamos los 25 gr de nata hasta los 90ºC y
vertemos sobre el chocolate blanco (previamente troceado), mezclamos bien hasta
que se funda el chocolate, después añadimos
la gelatina (previamente hidratada y escurrida). Por otro lado mezclamos las
yemas con el azúcar. Mezclamos esto con la ganache hasta tener una mezcla
homogénea. Emulsionamos con el turmix para que nos quede una mezcla bien
homogénea y cuando este a 33ºC añadimos la nata semimontada poco a poco con
movimientos envolventes. Vertemos sobre un aro ovalado de 14 cm de largo y 7 cm
de ancho (opcionalmente podemos colocar una tira de papel de acetato en el
contorno del aro para que nos sea más fácil desmoldarlo). Teniendo en cuenta
que la altura de la tarta será de 4 cm intentaremos que la mousse de chocolate
blanco tenga una altura de un máximo de 3 cm. Congelamos la mousse.
Ahora elaboramos la
mousse de café, primero cogemos los 375 gr de nata y la calentamos, mientras se
va calentando vamos añadiendo el café poco a poco y removiendo para que no
queden grumos, cuando llegue a los 90ºC la retiramos del fuego, añadimos las
estrellas de anís, tapamos y dejamos infusionar. Cuando este fría la pasamos a
la nevera y la dejamos ahí durante 24 horas, bien tapada. Al día siguiente
retiramos las estrellas de anís y semimontamos esta nata. Reservamos en la
nevera. Ahora calentamos los 100 gr de nata en un cazo, por otro lado
mezclamos las yemas con el azúcar, cuando la nata llegue a los 90ºC
retiramos del fuego y la vamos incorporando a las yemas poco a poco para
equilibrar la diferencia de temperatura y removemos. Pasamos la mezcla de nuevo
al cazo y ponemos a calentar a fuego suave procurando que no pase de 84ºC (si
pasara de 84ºC el huevo cuajaría) y sin dejar de remover hasta que empiece a
espesar ligeramente. Retiramos del fuego y añadimos la gelatina
(previamente hidratada y bien escurrida). Colamos y dejamos enfriar, cuando
este a 33ºC añadimos la nata semimontada poco a poco con movimientos
envolventes.
Vertemos la mousse en
un aro ovalado de 18,5 cm de largo y 12,5 cm de ancho cubierto con una tira de
.papel de acetato para facilitar el desmoldado, rellenamos hasta la mitad,
sacamos el interior de mousse de chocolate del congelador y lo ponemos encima
de la mousse de café de modo que quede centrado, presionamos ligeramente para
que se asiente bien y terminamos de rellenar con más mousse de café hasta
llegar arriba, alisamos con la espátula y congelamos.
Al día siguiente sacamos
el streussel del congelador y con ayuda de un rallador grueso vamos rallando el
streussel encima de un aro ovalado de 21 cm de largo y 14 cm de ancho. Horneamos a 160ºC durante 12-15 minutos.
Dejamos enfriar.
Mientras vamos
preparando el glaseado, ponemos a calentar la leche en un cazo, añadimos la
glucosa y mezclamos bien, cuando alcance los 90ºC la retiramos del fuego y
añadimos la gelatina (previamente hidratada y escurrida). Ahora cogemos esta
leche y escaldamos el chocolate (previamente picado), emulsionamos con el
turmix para que quede una mezcla lisa y dejamos enfriar. Cuando el baño este a
35ºC, sacamos la tarta del congelador, la desmoldamos y la colocamos sobre una
rejilla, bañamos con el glaseado y después la colocamos encima del streussel.
Metemos en la nevera para que se vaya descongelando.
Para hacer la flor de
chocolate empezaremos haciendo dos bases redondas, fundimos el chocolate con
leche a 45ºC y lo atemperamos, vertemos tres cuartas partes del total sobre un
mármol frío hasta que alcance los 25ºC de temperatura de descenso, removiendo
con la espátula para acelerar el proceso, unimos con el resto de cobertura para
que alcance los 29ºC de temperatura de templado. Ahora vertemos un poco de
chocolate sobre dos aros de 4 cm de diámetro y dejamos secar.
Mientras vamos
preparando los pétalos, fundimos el chocolate blanco a 40ºC, vertemos tres
cuartas partes del total sobre el mármol frío hasta que alcance los 24ºC de
temperatura de descenso, removiendo con la espátula para acelerar el proceso,
unimos con el resto de cobertura para que alcance los 28ºC de temperatura de
templado. Ahora preparamos tres hojas de papel de acetato y con la ayuda de una
puntilla (cuchillo pequeño) vamos sumergiendo la puntilla en el chocolate y
vamos marcando los pétalos en las hojas de papel de acetato, en cada hoja
haremos una medida diferente, haremos unas cuantos de 6 cm, otros de 4 cm y
otros de 3 cm. Tienen que quedar bastante finos, así que conviene hacer
bastantes por si se nos rompe alguno, a medida que los vamos haciendo los vamos
colocando en un molde de media caña para que cojan una forma curva cuando se
sequen.
Mientras se secan los
pétalos iremos preparando los pistilos y las placas de chocolate negro, fundimos
el chocolate negro a 50ºC y lo atemperamos, vertemos tres cuartas partes del
total sobre un mármol frío hasta que alcance los 27ºC de temperatura de
descenso, removiendo con la espátula para acelerar el proceso, unimos con el
resto de cobertura para que alcance los 31ºC de temperatura de templado. Para
hacer los pistilos cogemos un poco del chocolate atemperado, rellenamos un
cucurucho de papel parafinado y vamos trazando pequeñas líneas ligeramente
curvadas sobre un trozo de papel de acetato, haremos líneas de unos 5 cm
aproximadamente. Dejamos secar.
Ahora cortamos varias
tiras de papel de acetato de unos 10 cm aproximadamente, vertemos un poco del
chocolate atemperado sobre cada tira, alisamos y con ayuda de una rasqueta de
plástico le damos forma de punta en un extremo, el otro extremo lo dejaremos
más ancho, a continuación metemos estas
tiras en vasos formando una especie de espiral, unos los ponemos con la punta
hacia dentro y otros con la punta hacia a fuera para que cojan diferentes
formas. Dejamos secar.
Ahora cogemos una de
las bases redondas que preparamos anteriormente y vamos montando los pétalos
sobre esta base uniéndolos con chocolate fundido y enfriando la zona de unión
con el spray de aire comprimido, pondremos los más pequeños en la parte de
dentro dejando un pequeño círculo en el centro para después colocar los
pistilos, los pétalos más grandes los pondremos en la parte de fuera. En este
punto resulta imprescindible trabajar con guantes de látex porque si no al
coger los pétalos con el calor de nuestras manos se derretirían los pétalos.
Una vez tenemos
montados todos los pétalos pulverizamos ligeramente con un spray rojo de
manteca de cacao para que queden pequeños puntitos rojos encima de los pétalos,
después cogemos un poco de oro en polvo con la punta de un cuchillo y soplamos
encima de la flor para darle un poco de brillo.
A continuación ponemos
un poco de chocolate fundido en el hueco que dejamos en el centro de la flor y
colocamos los pistilos de chocolate negro.
Ahora cogemos la base
redonda de chocolate con leche que nos sobro y la colocamos encima de la tarta,
en una esquina de la base ponemos una pequeña montañita de chocolate fundido y
enfriamos con el spray de aire comprimido. Ahora colocamos la flor encima
uniéndola a la base con un poco de chocolate fundido, gracias a la pequeña
montañita que pusimos en un lado conseguiremos que la flor quede ligeramente
inclinada y quede más vistosa. Finalmente cogemos las placas de chocolate que
teníamos en los vasos y colocamos tres de ellas alrededor de la flor uniéndolas
con chocolate fundido.
33 Comentarios
En cada tarta te superas, maravillosa, y los sabores tienen que ser lo mas.La flor te ha quedado estupenda, nadie diría que es la primera que haces.Genial, me quito el sombrero y sigue deleitándonos con estas maravillas.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias Marianela, me alegro de que te guste, la tarta estaba riquísima! La flor me dio mucho trabajo pero cuando por fin logre acabarla me encanto como quedaba, aunque después de tanto esfuerzo me daba un poco de pena comérmela, pero ya se encargo mi familia de incarle el diente,je,je.
EliminarUn abrazo.
Roberto, fantástica, qué arte con la flor.
ResponderEliminarMuchas gracias Irmina, llevaba tiempo queriendo hacer una flor de chocolate un poco elaborada para decorar una tarta y esto es lo que se me ocurrió.
EliminarUn abrazo.
Muy bonita Roberto y seguro que deliciosa. Me voy a atrever con ella, pero no con la flor.... Le pondré varios triangulos de chocolate negro y con leche. Sera mas facil creo yo. Muchisimas gracias por compartirla con todos nosotros y por los detalles que ayudan mucho. Un abrazo . Marivi
EliminarMuchas gracias Marivi! Me alegro de que te animes a prepararla, si te gusta el café tanto como a mi seguro que te encantara. Lo de la flor lo hice mas que nada porque era algo que tenia pendiente desde hacia tiempo y quedaba mas bonita encima de una tarta que la flor sola, pero puedes decorarla con lo que te apetezca.
EliminarUn abrazo.
Roberto, lo de la flor me ha dejado sin palabras.... y encima es la primera vez que hacías algo así!. Increible de verdad, tu si que vales, jaja. En serio, hay algo que te salga mal??
ResponderEliminarSaludos y enhorabuena por esa obra de arte
Muchas gracias Eva! Me alegro de que te guste. La flor es la primera que hago, pero llevo mucho tiempo haciendo decoraciones con chocolate y es algo que se me suele dar bien, por eso me atreví a hacer esta flor.
EliminarTodavía hay cosas que no domino,je,je, pero cuando algo no me sale bien lo practico una y otra vez hasta conseguir que salga bien, es cuestión de no darse por vencido y seguir intentándolo, al final acaba saliendo!
Un abrazo.
Ydigo yo...puede saberse porqué no conocía tu blog hasta hoy?? madre mía lo que me estaba perdiendo! te pineo y repineo todo ya mismo!
ResponderEliminarEnhorabuenatu trabajo.
Besossssssssss
Mejor dicho: Enhorabuena por tu trabajo!!
ResponderEliminar;-)
Muchas gracias Cristina! Hoy día hay tantos blogs en internet que es difícil conocerlos todos,me alegra saber que te gusta lo que hago y estoy encantado de tenerte por aquí.
EliminarUn abrazo.
Qué más se puede decir. Tu tarta lo tiene todo!!!
ResponderEliminarOye tengo una curiosidad. En el glaseado da igual utilizar gelatina en hojas, en polvo, de colapez????
He visto algunas recetas que el galseado lo hacen con gelatina en polvo y ponen un montón de cantidad....
Un abrazo crack
Muchas gracias Alejandro! El glaseado se puede hacer de muchas maneras, también se puede hacer con pectina o con Kappa, cuando lo hacen con gelatina en polvo suelen hacer una especie de masa gelificada mezclando agua y gelatina en diferentes proporciones según la textura que quieran obtener, yo he visto que utilizan mucho la proporción 1/6 que significa que cantidad contiene de cada ingrediente, el 1 seria la gelatina y el 6 seria el agua.
EliminarTambién hay que tener en cuenta el porcentaje "Bloom", que es el poder de gelificación de la gelatina, ya que no todas tienen el mismo y esto se mide por un valor llamado "Bloom" que puede ir de 50 a 300. Cuanto mayor sea el valor Bloom mas poder de gelificación tiene la gelatina. En los paquetes de gelatina normalmente suele venir indicado el porcentaje bloom. Así que si ves que le ponen mucha cantidad puede que sea porque utilizan una gelatina con un bloom bastante bajo.
Un abrazo.
Cada nueva receta te superas y vas a ser el culpable de que alguna nos de algo cada vez que vemos una receta tuya y queramos imitarla, pero muchas gracias por deleitarnos con recetas y fotos de tu buen hacer
ResponderEliminarBesos y por cierto que ya tengo escusa para hacer el postre del domingo
Muchas gracias Eva! Me encanta que os animéis a preparar mis recetas, espero que también te animes a probar esta tarta y consigas sorprender a tus invitados el próximo fin de semana.
EliminarUn abrazo.
Roberto he descubierto hoy tu blog y te felicito me encanta tus recetas y esta tarta una maravilla .
ResponderEliminarbesos
inma
Muchas gracias Inma, me alegra saber que te gustan las recetas y estoy encantado de tenerte por aquí.
EliminarUn abrazo.
Qué maravilla todo Roberto! Yo también he descubierto hoy tu blog y estoy alucinando, ¿¿como puedes ser solo un amateur?? Esta tarta en particular es super elegante, me encanta todo! Muchas felicidades por todos tus trabajos, son preciosos y con unas combinaciones sorprendentes y seguro que exquisitas. Felicidades de nuevo!. Irma
ResponderEliminarMuchas gracias Irma, me alegro de que te guste la tarta. Me apasiona el mundo de la pastelería y le dedico todo mi tiempo libre, practico las recetas una y otra vez hasta que consigo que salgan como yo quiero y cuando no estoy practicando estoy investigando para aprender cosas nuevas...creo que estoy un poco obsesionado, je,je, pero es que no lo puedo evitar, me encanta!
EliminarUn saludo.
La próxima vez que intente cubrir una tarta con glaseado brillante, antes me leeré bien atentamente tus instrucciones. Nunca he conseguido que los costados queden uniformes... siempre se notan las gotas o me queda alguna pequeña zona por cubrir. Envidia! De la sana, claro!
ResponderEliminarLo de bañar tartas con glaseado es una cuestión de practica, cuantas mas tartas hagas mejor te saldrá. A mi las primeras me quedaban fatal y me pasaba lo mismo que a ti, se veian las gotas, me faltaban trozos, a veces también se notaban las burbujas de aire, así que me puse a practicar para averiguar porque quedaban tan mal.
EliminarY descubrí que influyen muchas cosas, una de las mas importantes es la temperatura a la que esta el glaseado cuando lo viertes encima de la tarta congelada, yo lo he probado a diferentes temperaturas y la que me ha ido mejor es a 35ºC, es el punto en que mejor fluye el glaseado. Otro cosa importante es verterlo con decisión y sin miedo, porque si te quedas demasiado rato en un mismo punto se te forman montañitas, yo suelo empezar desde el centro y voy haciendo una especie de espiral hacia a fuera.
También influye la forma de la tarta, por lo general se bañan mejor las tartas redondas o ovaladas que las cuadradas o rectangulares. Es cuestión de ir practicando y no darse por vencido!
buenas ,soy seguidor de tu blog y he realizado algunas de tus recetas pero esta en concreto al intentar montar la nata de café y anis, no se montaba ,y no se donde esta el fallo , ya me comentas algo un saludo y felcidades por tu blog
ResponderEliminarSi la has dejado reposar en frío durante 24 horas después de haberla calentado en principio te tendría que montar sin problemas. Si la intentas montar antes de que pase ese tiempo de reposo es posible que no te monte. Otro detalle importante es que te asegures de que la nata que estas utilizando tenga un porcentaje mínimo del 35% de materia grasa, porque las que tienen menos no suelen montar muy bien.
EliminarTambién puedes probar a meter en el congelador el bol que vayas a utilizar para montarla durante 10 o 15 minutos para que se enfríe bien, ya que la nata monta mejor cuanto mas fría esta. A veces suele pasar que sacas el bol del lavavajillas y todavía esta algo caliente y si intentas montar nata ahí nunca te montara, puede parecer bastante obvio pero a veces son esos pequeños detalles que pasamos por alto los que hacen que algo no salga bien.
Si aun así no consigues que te monte siempre puedes infusionar el café y el anís en la otra nata (la que utilizamos para hacer la crema inglesa), pero eso si asegurate de volverla a pesar una vez que la hayas infusionado porque siempre se evapora algo, si ves que se ha evaporado algo de nata bastara con añadir un poco mas hasta completar el peso indicado.
Un abrazo.
gracias por los consejos , pero al volver a leer la receta, me di cuenta que no monte la nata antes de calentarla , y tampoco estuvo 24 horas justas,asi ya probare otro dia y te cuento, un saludo
Eliminarpor cierto una duda que me queda si caliento la nata semimontada no se baja o se corta?
Eliminarun saludo
La nata no tienes que montarla hasta después de las 24 horas de reposo, porque si la montas y después la calientas se te bajara. Las 24 horas de reposo son precisamente porque como hemos calentado la nata, necesita ese reposo para que se pueda montar.
EliminarPrimer paso: calentar la nata, añadir el café y el anís.
Segundo paso: reposo de 24 horas en frío.
Tercer paso: montar la nata.
La nata necesita estar muy fría para que se pueda montar, por eso le damos el reposo de 24 horas. Ya me contaras que tal te ha ido.
Un saludo.
Buenos días Roberto, como no dispongo de moldes ovalados, podrías decirme que medidas tengo que usar para aros redondos. Gracias, como siempre una maravilla de tarta.
ResponderEliminarHola, en el molde ovalado que he utilizado caben aproximadamente unos 900 gr y esa cantidad es mas o menos lo que cabe en un aro redondo de 16 cm de diámetro, pero también hay que tener en cuenta la altura del molde, en este caso el ovalado era de 4,5 cm de altura, así que necesitarías un aro redondo de 16 cm de diámetro y 4,5 cm de altura.
EliminarPero te saldrá bastante pequeña, porque en los aros redondos cabe mas cantidad, lo ideal seria hacerlo en un aro redondo de 20 cm de diámetro, en uno de 20 cm y 4,5 cm de altura caben aproximadamente 1400 gr, así que tendrías que multiplicar la receta por 2 para que te llegue.
Un abrazo.
Muchísimas gracias.
EliminarAcabo de conocer tu blog y me he enamorado de esta tarta!!! Puedo cambiar la avellana molida por almendra molida?? Asi me pongo ya a hacerla,q tiene una apariencia.....eso si,sin la flor,que esomya son palabras mayores!
ResponderEliminarIncreible que hagas esto sin ser profesional,me quito el sombrero
Muchas gracias! Me alegro de que te guste el blog y que te animes a preparar esta tarta, la verdad es que la tarta no es demasiado difícil, lo único difícil es la flor que a mi me llevo mucho rato, pero lo demás es sencillo. El streussel de avellanas lo puedes hacer perfectamente con almendra molida si no te van mucho las avellanas.
EliminarUn abrazo.
es possible hacerlo sin amaretto??
ResponderEliminarSi, simplemente no se lo añadas y ya esta.
Eliminar