Para hacer estos
panecillos he utilizado una receta del famoso “pan preñao” típico de Asturias y
Cantabria, donde se le pone chorizo en su interior. Yo lo que he hecho ha sido
substituir el chorizo por un Frankfurt y a la masa le he añadido mostaza de
Dijon y algunas semillas de mostaza para reforzar el sabor de la mostaza, la
idea era hacer una especie de “perrito caliente” pero con una masa con sabor a
mostaza y una textura más crujiente que la del típico bollo que se utiliza
normalmente para hacer perritos calientes. El resultado final son unos
deliciosos panecillos crujientes ideales para tomar como aperitivo o merienda.
Con esta receta
participo en el concurso de Canal Cocina “La Tapa Gourmet de Maille”, si os animáis
aun estáis a tiempo de presentar vuestra tapa!
Ingredientes
250 gr de harina
panificable, 2,5 gr de levadura fresca, 5 gr de sal, 150 gr de agua, 3 c/p de
mostaza de Dijon, 5 gr de semillas de mostaza, 4 salchichas de Frankfurt.
Abreviaturas:
c/p=cucharada de postre.
Elaboración
En un bol amplio mezclamos la harina y la sal, cogemos una pequeña parte
del agua y diluimos la levadura en ella, al resto del agua le añadimos las tres
cucharadas de mostaza y mezclamos bien. Añadimos el agua con la mostaza al bol
y mezclamos un poco, a continuación añadimos el agua con la levadura diluida,
seguimos mezclando y añadimos las semillas de mostaza. Mezclamos bien con las
manos hasta que se unan todos los ingredientes y nos quede una masa homogénea.
Tapamos con un trapo húmedo y dejamos reposar 10 minutos.
Amasamos ligeramente en
la mesa untada con un poco de aceite para que no se pegue, dejamos reposar
otros 15 minutos y volvemos a amasar ligeramente. Repetimos esta
operación dos veces más, hasta conseguir una masa lisa y homogénea.
Lavamos y secamos el
bol, lo untamos ligeramente con aceite, introducimos la masa y dejamos que
fermente durante 1 hora y media aproximadamente, cubierta con un trapo húmedo.
Volcamos la masa sobre
la mesa ligeramente enharinada y la dividimos en porciones de 50 gr, para poder
formar los panecillos. Para ello, primero formamos siete bolas tensando
bien la superficie, cubrimos con un trapo y las dejamos reposar 10 minutos.
Cogemos una bola y la
estiramos y aplanamos ligeramente hasta hacer una torta gruesa redondeada, cortamos
los frankfurts por la mitad y colocamos una mitad en el centro de la masa,
plegamos por la mitad como si fuera una empanadilla y hacemos rodar la masa
hacia delante y hacia atrás, presionando levemente hacia abajo para conseguir
expulsar por los extremos el aire que haya quedado atrapado en el pliegue.
Repetimos esta operación con las demás bolas y las vamos depositando sobre una
bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado. Tapamos con un trapo
húmedo y dejamos fermentar hasta que casi hayan doblado su volumen, 1 hora y
media aproximadamente.
Precalentamos el horno
a 220ºC y ponemos una bandeja en medio y otra abajo. Hacemos unos cortes a
las piezas con una cuchilla, abrimos el horno y deslizamos el papel sulfurizado
donde tenemos los panecillos inclinando un poco la bandeja para que caigan
sobre la bandeja que tenemos caliente en el interior del horno, echamos un vaso
de agua en la bandeja de abajo para crear vapor y pulverizamos un poco de agua
sobre los panes y las paredes del horno.
Horneamos durante 15-20
minutos, hasta que los panecillos alcancen un ligero tono marrón y suenen a
hueco al golpearlos con los nudillos en la base. Dejamos enfriar completamente
sobre una rejilla para que circule bien el aire por debajo.
2 Comentarios
Excelente como siempre Roberto. Espero que tengas muchísima suerte con el concurso y que ganes y vivas la experiencia de estas cosas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Alejandro, aunque no se si ganaré porque me entere un poco tarde del concurso y ya tienen a siete de los ocho finalistas, pero bueno aun queda una plaza, a ver si hay suerte.
EliminarUn abrazo.